El
Jueves 13 volví de pesca junto con mi aita y Carlos por la zona de la vez
anterior. Salimos de la lonja sobre las 5:30 con una temperatura de pleno
verano, aunque las previsiones del tiempo eran de bajas temperatura y lluvia.
En
zona de pesca mi aita y yo bajamos a un pedregal cómodo, pero que al ser
pleamar tienes muy poco recorrido, mientras que Carlos se fue a investigar.
Macizamos y enseguida salieron las primeras mojarras, con alguna pasada del
kilo, pensábamos que las metíamos, pero no fue así y las picadas fueron muy
salteadas. Nos movimos un poco para la izquierda y alguna mas salió. Sobre las
9:00 empezaron unos truenos, que nos hizo recoger y esperar que pasara la
tormenta. No es un tema para estar arriesgando.
Como veíamos que no paraba y
que cada vez llovía mas, decidimos recoger y marchar al coche. Justo subiendo
nos llama Carlos que las tenia locas y que fuéramos donde el. Llegamos al coche
y como paro la lluvia, decidimos ir donde Carlos. Cuando llegamos y
vimos de donde andaba pescando nos quedamos sorprendidos, seria una altura sobre
los 25 m. Cuando me acerqué me temblaban las piernas y todo. Tardé un poco en
acostumbrarme a la altura y ponerme a pescar. Era tirar y picar, pero perdíamos
muchas por el seno que teníamos. Para mi era la primera vez que pescaba de
tanta altura y sacaba los peces a carrete. Fue una experiencia bonita, pero no
se si la repetiré. Sobre las 10:30 se puso a llover y salió un fuerte viento
gallego por lo que dimos por finalizado la jornada.
Volvimos
contentos al pueblo con unas 25 mojarras y lamentándonos de la tormenta que nos
hizo dejar de pescar cuando mas picaban, por lo menos esto es lo que decía
Carlos. La altura de pesca la he puesto
a ojo, pero como anécdota comentar que yo en el carrete que lleve un 4000 con
pita del 0.45 me quedaba sin línea en el carrete.