viernes, 23 de agosto de 2013

WHATSAPP III


Pescas del sábado 10 de agosto, las 2 primeras de Fonso por Ajo y las otras 2 de Carlos y mi aita por Bizkaia. Las dos con mares bellas.


martes, 20 de agosto de 2013

MAR FUERTE

 Después de la charla de Juan en Muskiz sobre la pesca “a bravo”, me quede con ganas de intentarlo, pero nunca era el día.
 Este martes y de casualidad, se me presento la oportunidad de intentar practicar lo comentado en Muskiz. Digo intentar, porque es muy diferente a como pesco yo y cuesta adaptarse. El resultado no fue muy bueno, cinco terciadas y una sobre los 800 gr. para dos cañas. Decir también, que una muy grande, ( fácil que pasaría del kilo ) me rompió el bajo. También comentar que pese a lo que se suele decir fue lanzando en una zona bella, ( zona roja de la foto ).Tuve varios problemas, uno fue que la fuerza de la corriente me trituraba la gamba y poco me aguantaba en el anzuelo. Yo intentaba tapar hasta la paleta como comentó Juan, pero al de nada aparecía la gamba colgando. Otro fue, que el macizo de sardina no aguantaba mucho en la puesta, y enseguida era sacado para fuera. Mas tarde, intenté probar a pescar fuera, en unas piedras que se intuían, pero las bogas no te dejaban. Otro problema es que el cocho se movía como un “sputnik” y no se mantenía donde yo quería. No sé si el inconveniente era que el corcho era pequeño, o que con tanta mar hay que intentar no arrimar tanto. intenté pescar en la zona azul de la foto, es la zona donde siempre hemos sacado los peces, eso sí con menos mar.
 Después de mis impresiones de la primera vez que intento pescar “a bravo”, cuento un poco la salida.

 A las seis de la mañana me estaba esperando mi aita en la lonja a que saldría de trabajar. Me cambié de ropa y rumbo al pesquero. Como me dijo mi aita que había un poco de golpe, marchamos a una grietas cerca de Cerdigo. Cuando vimos el pesquero desde arriba estaba pasado, y mi aita no quiso ni bajar, pero insistí y al final bajamos.
 Preparo el aparejo y como me sonaba puse todo el plomo abajo y nada cerca del corcho, también pesqué con el 23 (la pita más fina que tengo), recordando la importancia que le dio Juan al grosor de la pita, a diferencia de Nanclares, que no le da mucha importancia.
 Estuve un buen rato macizando, sin tener ninguna picada. Me costó, pero al final metí los mubles. Eso si, estos entraban al macizo nada más echarlo, pero luego salían fuera. Vista esta circunstancia intente pescar un poco más fuera, pero las bogas te comían. Aunque me costaba mantener el corcho, debido a las bogas me puse a pescar más pegado a las rocas ( zona azul de la foto ). Cuando llevaba un rato pescando noto que el cocho no se mueve acorde con la corriente, tiro y la grande del día trabada. Bueno, pensé que igual sí que las metía, pero no fue así y no tuve más picadas en mucho rato.

Aburrido de no tener picadas fui donde andaba mi aita que estaba en una zona más bella. Aquí fue donde sacamos cuatro terciadas, pero como no había mucha actividad en pleamar volví donde el principio. Eso si, no pesqué en la zona azul, sino que tire en la roja, que era donde más bello se quedaba. Nada más tirar, la última terciada y luego una bien grande que tiró para la derecha y me rompió la pita. Estaba complicado. Después de esto ni picada, por lo que decidimos dar por terminada la jornada.

jueves, 15 de agosto de 2013

POR CANTABRIA

El martes 6, repitió Félix, mi compañero de trabaja jornada de pesca. Parece que le a cogidó gusto al asunto. Esta vez solo fuimos los dos, mi aita tenia compromisos y no pudo acompañarnos. A las 5:30 habíamos quedado en la lonja, para marchar luego para Cantabria a enseñarle unas puestas muy diferentes a  las del otro día.
La intención era salir a las 5:30 pero me quede dormido y hasta las 6:00 no aparecí por la lonja .En la lonja cogimos rápido los bártulos y a la depuradora de Castro a ver la mar. En la depuradora nos topamos con unos conocidos del pueblo que venían de ver la mar y nos comentaron que había belladas y que luego venia un golpe.  Nosotros comprobamos que era cierto y marchamos para la zona de Cerdigo. En Cerdigo volvimos a topar los mismos conocidos del pueblo y después de hablar un rato y comprobar que no íbamos al mismo sitio, nos dirigimos a una punta que pega bastante con la esperaza de que en las belladas se podría pescar bien. Llegamos al pesquero y media vuelta ya que estaba ocupado. Menos mal que era martes.
Después de darle mil vueltas a la cabeza y mirar varios pesqueros cercanos, decido cambiar de zona y marchar a una lastra que  en pleamar te cierra. A la lastra nos costó pasar ya que todavía había bastante agua pero al final pasamos. Palada de macizo al agua y las primeras picadas no se hicieron esperar. Tuvimos una mañana de lo más entretenida con una actividad bastante continuada y eso que por momentos se quedaba muy plato la puesta. Casi todas las mojarras eran terciadas, aunque de vez en cuando salía alguna maja cercana al kilo. Al principio pescamos muy juntos, para luego Felix marchar  un poco para la izquierda. Aquí fue donde tuvo trabado un bicho que tiraba mucho y para afuera que al final le rompió el 24. No llegamos a verlo pero mojarra no parecía. Sobre las 11decidimos dar por terminada la jornada y marchamos a la lonja contentos de la pesca realizada.
Hacía tiempo que no pescaba por Cantabria y me sorprendió la cantidad de pescadores que vimos. Se nota que es agosto y que día de playa no salió

lunes, 12 de agosto de 2013

NOS PASO DE TODO

Otro día de pesca, donde nos pasó de todo. Menos mal que al final arreglamos la mañana con una pesca decente.
A las  cinco estábamos en la lonja, Fonso, Ángel Carlos, mi aita y yo. Fonso y Ángel se iban a quedar por Cantabria ya que Ángel  anda fastidiado de la rodilla y Fonso tenía prisa. Mi intención y la de mi aita era quedamos también por Cantabria, si la mar estaba plato, o si pegaba un poco más, marchar a un pedregal que hace como un año que no frecuentamos. Carlos salió el primero a ver la mar, mientras que nosotros un poco más tarde. Cuando llegamos al superpuerto, Carlos comento que bella bella no estaba y que él marchaba a una punta que hay que andar. Al final me anime y marchamos los dos, mientras que el resto se fue para Cantabria. Por el camino, estuvimos hablando de tal y cual pesquero, y al final cambiamos de idea y marchamos a un pedregal, un poco más lejos que la punta que teníamos en mente.
Nada más bajar del coche, empezaron los contratiempos. El primero Carlos no había cogido gambas. Menos mal que no fue solo. El segundo llegamos de noche y sin linternas. Este no fue muy grabe ya que tire de recursos Android y utilice la linterna del móvil, consumiendo casi toda la batería. Por la bajada nos perdimos un poco y nos costó encontrar el camino.
Llegamos a la puesta de día y nos pusimos a pescar los dos juntos. Costo, pero al final sacamos alguna bien lejos. Bonita la batalla que presentan los sargos en largo. Cuando dejaron de picar y la marea fue bajando, marchamos a la zona caliente del pesquero.Una zona de caños que se forman en bajamar. Aquí fue donde me paso lo peor de la jornada. Aunque hay varios caños los peces siempre han salido en uno.  Como hacía tiempo que no frecuentaba el pesquero me equivoque de caño y para colmo de males como no entraban las mojarras venga macizar y macizar. Carlos aburrido de que no entraran los peces marcho para donde pescamos nada más bajar, mientras que yo  seguí  empecinado en mi error.  Sobre las 9 cuando era bajamar aburrida de la falta de peces me moví para la izquierda y fue cuando me di cuenta de mi error. En el caño bueno enseguida empezaron las picadas y era tirar y picada, saliendo alguno kilero. Aquí también me pasó de todo, La primero que intente llamar a Carlos pero no tenía cobertura, lo segundo que como llegue tarde, la marea estaba subiendo, y una ola me calo entero, y cuando digo entero es entero. Lo tercero que esa misma ola me tiro el cubo y perdí la pala, macizo poco. . Lo cuarto y esto por tonto, un sargo pasado de  kilo se me escapo de las manos, cuando lo quería meter en el cubo. Si es que no aprenderé que hay que meter el dedo por la agalla. Lo quinto y más importante que me quede sin gambas y tuve que improvisar, sacando las 2 últimas con lapas.
 Cuando me quede sin macizo marche donde Carlos, que alguna había engañado, para marchar a la lonja donde nos esperaban con unas tortillas cortesía de Txema, también mi aita con ropa para cambiarme, ya que tenía calada hasta la ropa interior. En la lonja también andaba el otro equipo, que habían estado por Cerdigo y venían contentos. Las dos últimas fotos son de ellos. Carlos y yo engañamos sobre 28 piezas, que  no salen todas en la foto, por lo que cuando me quise poner a sacar la foto las más grandes habían volado. En definitiva después de todo lo que nos pasó, una buena pesca. Las lapas, las volveré a probar en otro momento ya que estamos teniendo problema para encontrar gambas a buen precio.

miércoles, 7 de agosto de 2013

CON UN COMPAÑERO DEL TRABAJO

Hace ya un tiempo hable con 2 compañeros de trabajo que eran pescadores de rió y al final quedamos en ir un día a por mojarras. El día elegido fue el viernes 26 en el cambio de relevo. A las 5:00 salimos de Muskiz Carlos , mi aita y yo para recoger a mis compañeros por el camino. A las 5:15 cogimos a uno, el otro me mando un mensaje que estaba malo y que para otro día.
La cuatro fuimos  a ver un pedregal y para luego decidir donde pescábamos. Mi aita quería bajar a este pedregal, mientras que yo me empeñe en ir a probar en pleamar una puesta de altura que tan buenos resultados nos ha dando últimamente. Al final los cuatro acabamos en la altura. Llegamos de noche y solo Carlos se puso a pescar, mientras que los demás nos quedamos a esperar el amanecer. Justo al amanecer me puse yo también a pescar, mientras que mi aita se marcho con mi compañero a otro pedregal.
Carlos y yo apenas sacamos peces la puesta se quedaba muy bella. Probamos en varios pesqueros cercanos pero nada. Visto el escaso resultado llamamos a mi aita haber que tal. Nos cometo que el primer pedregal estaba muy bello por lo que fueron andando al que habíamos visto desde la mañana y que tuvieron un rato donde les comían, pero que la actividad había bajado bastante. Como donde andábamos nosotros nada de nada cogimos en coche y rumbo donde mi aita. En el pedregal aguna mas salio pero al ir bajando la marea se quedo muy bello por lo que decidimos dar por terminado la jornada cogiendo unos muble para el macizo. La crisis llega a todos lados y andamos muy escasos de sardinas.
Al final una pesca que ni fu ni fa pero creo que mi compañero lo paso bien, porque ha repetido.